Las tasas de trabajo de los jugadores son más bajas que en el fútbol (deporte del cual muchos extractan estrategias para aplicarlas al rugby) y se caracterizan por períodos de recuperación más largos que los de ejercicio. En cualquiera de los juegos, los valores promedio encubren la secuencia ocasional de actividades intensas seguidas de pequeñas interrupciones. Las respuestas fisiológicas a la competencia en el rugby indican que el juego demanda del metabolismo aeróbico y los jugadores se pueden beneficiar de un acondicionamiento físico acorde.
La fuerza muscular es el requerimiento de todas las posiciones del juego. El desarrollo de las capacidades de entrenamiento fuerza a los jugadores a la necesidad de adoptar una aproximación sistemática a las prácticas con el objeto de estar preparado para una competición de alto nivel.
A determinado nivel hay que considerar que si bien un partido de rugby dura 80 minutos más el tiempo adicionado por el árbitro, un juego típico tiene sólo 32 minutos de tiempo de juego (promedio para una investigación de tres años en partidos jugados como local de un equipo de primera división en la ciudad de La Plata, Argentina).
La actividad se compone de 140 secuencias de acción, en promedio. En conjunto, 32% de estas secuencias son de 0 a 5 segundos de duración, 24% son de 5 a 10 seg. , 29% de 10 a 20 seg. , 10% comprenden secuencias de 20 a 30 seg. de duración y sólo 5% son mas largas que 30 seg.
Estas cifras implican un énfasis en el metabolismo anaerobio durante los intensos períodos de juego (56% de menos de 10 seg. de duración). Un indicador del gasto total de energía en los partidos de rugby puede ser provisto por la distancia total cubierta en un encuentro. Esto puede estar dividido en dos intensidades diferentes de ejercicio para actividades opuestas, y de ser complementado por el establecimiento de cocientes de duraciones de ejercicio/descanso durante el partido. Igualmente se están terminando de procesar últimos datos.
Según un estudio (Williams R., Skilfull Rugby, Press London) la distancia total cubierta en rugby es de 5,5 Km. para forwards y 3,8 Km. para backs. Se estimaron valores (Reid, R. A concept of fitness and its measurement in relation to Rugby J. Sports Med.), Que se extendían desde 4.8 a 9.6 km. Incluso la distribución de la actividad (Morton, A. Applying physiological principles to rugby training Sports Coach) fue 37% de caminata, 29% de trote y 34% de alargues/carreras de moderada intensidad, o de piques de máxima velocidad (sprints).
Estos datos deben ser considerados y tenidos en cuenta a la hora de evaluar y planificar con nuestros deportistas. Son un punto importante en un juego que aceleró su aproximación sistemática al entrenamiento y la competición. Aquellos que aspiren a jugar en el nivel más elevado deben adoptar una aproximación científica al entrenamiento.
http://www.netprosolutions.com/faq_mohicanos/index.php?action=artikel&cat=51&id=88&artlang=es
Foto: Senior Pladar UAR.
No hay comentarios:
Publicar un comentario